Con tan sólo analizar tres tipos de carteles, podremos observar que existen grandes diferencias entre las señales del viejo continente y las argentinas.
Al hablar de zona de derrumbes, la mayoría de los países europeos se inclina por simples dibujos que por momentos resultan confusos, como en el caso de Francia, o el de España.
En la Argentina, en cambio, encontramos carteles con un gran lujo de detalle, como éste, donde vemos al atento conductor tratando de evitar las piedras que caen desde la montaña, o éste, donde el hombre se quedó dormido, o está buscando algo en el asiento trasero, pero aún así logra esquivar las piedras.
En el caso de los niños, el viejo continente suele ser más detallista. Nuevamente, se destacan los carteles de Francia, donde los estudiantes asisten con boinas al colegio, o los de Dinamarca, donde los jóvenes están tan ansiosos por ir a clases, que hasta salen de los carteles.
Volviendo a la Argentina, podremos encontrar diferentes variantes: la clásica madre que empuja a su hijo para que vaya al colegio, el padre que viene arrastrando a su chico hace tres cuadras, o bien, el caso del papá que se agacha para decirle a su hijo: "Si no vas al colegio, te quedas una semana sin jugar a la PlayStation".
Al analizar el caso de las obras viales, las diferencias también resultan notables. Por ejemplo, observen el estado físico de este trabajador francés. Realmente envidiable. Y ni hablar si lo que está sosteniendo con su mano derecha no es una pala.
Ahora, en el caso argentino, encontraremos al clásico operario con la pala en la mano (aunque en realidad es pura facha, ya que la típica montaña de tierra no figura en nuestro cartel). Eso sí, por las dudas, debajo aparece la frase "Hombres Trabajando". No sea cosa que alguien dude al respecto.
Las señales viales dicen demasiado. Si quiere pasar un buen rato descubriendo los diferentes carteles del mundo, ingrese a "Bartolomeo: Road signs of the world" y diviértase. |