En Temple Terrace, San Petersburgo, Estados Unidos, un Ford Focus 2002 negro, llevaba un conductor apurado. Si no pisaba el acelerador, perdería los primeros minutos de su clase de 2º grado. En el camino recogió a un compañerito suyo que también llegaba tarde.
En el camino al colegio sobrepasaron a uno de los micros repletos de estudiantes que se habían perdido. Los pequeños ingresaron al estacionamiento de la institución sin problemas, y el conductor precoz aparcó el carro. Apenas segundos antes de que suene la campana, los "responsables" estudiantes ya estaban dentro del colegio. "Se me estaba haciendo tarde...", dijo el niño según el Capitán Tracy Mishler de la policía de Temple Terrace.
Si bien es sorprendente que un niño tan pequeño tenga tal habilidad para conducir sin problemas un automóvil a través de calles y avenidas, la comunidad educativa se costernó ante el hecho y evalúan el castigo apropiado para el pequeño. El detalle más notable es que el auto, además, era robado. Al parecer, el tío del niño, Darrick Wilford, de 18 años (otro precoz), está preso desde el jueves por robo de autos. Él habría sido el que le enseñó a conducir al niño. |